Aquí vamos de nuevo....

Pudimos dormir juntos (de noche en tu zona horaria) pero terminamos discutiendo al día siguiente.

Me recordaste que estamos en una “relación tóxica” y que ya no somos “felices” (en tu perspectiva).

Y entonces me preguntaste “¿eres feliz?” y te dije que quizá no sea tan feliz como antes pero que esos pequeños momentos que paso contigo me alegran el corazón y que tú eres mi felicidad y que si eso es lo único “cosa” que me puedes dar ahora mismo lo tomaré porque no quiero estar sin ti.

Volvimos a discutir cuando te dije que quería acostarme contigo, pero que todavía tenía el teléfono cargado. Entonces me preguntaste: "¿Qué quieres que haga?", y admití que no quiero imponerte ni preguntarte nada porque temo tu respuesta.

Hubo silencio después de eso… y pensé que ya te habías quedado dormido pero respondiste a mi mensaje y te pregunté nuevamente si todavía podía dormir contigo.

Dijiste que estabas muy confundida y que ya no estabas contenta con la situación. Incluso me dijiste que no querías discutir ni esperar palabras vacías, y que estabas agotada. Incluso me preguntaste "¿no estás cansada?"

Tenía que disculparme por perturbar tu sueño. Pero ¿qué puedo hacer? Solo espero el poquito de tiempo que me puedes dar y, si no hay nada, no puedo hacer nada al respecto porque siento que no tengo derecho a exigir.

Y entonces me dijiste que ya te ibas a dormir y que queríamos dormir juntos, pero yo estaba cargando el móvil y me preguntaste de nuevo: "¿Qué quieres que haga?". Incluso me dijiste: "Esto es agotador".

Intenté llamarte, pero la llamada se perdió. Luego me enviaste un mensaje diciéndome que quizás estaba ocupado o haciendo algo. Cuando te dije que te llamaba, dijiste que no veías ninguna llamada. Así que intentamos llamarnos, pero no se conecta. Estaba respondiendo tus llamadas, pero por alguna razón, la llamada se corta después de 21 segundos.

Por último te dije que si tienes sueño y quieres dormir ya puedes hacerlo y que no te llamaré más.

Hubo silencio después de eso…

Simplemente fui a mi armario, tomé mis pastillas para dormir y traté de dormir....

Creo que estuve durmiendo casi la mitad del día y cuando finalmente abrí los ojos vi llamadas perdidas tuyas y mensajes diciéndome “perdón por todo”, “perdón por molestarte”, “sé feliz” y que estás orando por mí y por mi familia.

Te dije que no podía contestar tus llamadas porque tomé mis pastillas para dormir y que no me molestabas. Incluso te dije que no tenías que disculparte y que nunca seré feliz sin ti... eres mi felicidad

Llamaste. Contesté. Pero por alguna razón, la llamada se cortó y quedó como perdida.

Tenía que comer para poder tomar mis medicamentos y después de eso te pregunté si podía estar contigo pero no obtuve respuesta.

No sé cómo dejar de desearte, cómo detener el anhelo de estar contigo. Sé que ya no sientes lo mismo. Y duele tanto.

La mayoría de las veces, no puedo evitar “pensar demasiado” y llorar porque siento que mientras estoy aquí extrañándote, tú estás allá afuera olvidándome.

Y ese pensamiento me duele más de lo que las palabras jamás podrán describir.

No eras solo alguien a quien amaba, era mi mundo.

Te amo...y nunca me cansaré de ti...